La zona de elaboración de estos sobaos, amparados por la Indicación Geográfica Protegida (IGP), se encuentra en la comarca histórica del Pas (Cantabria). Esta región, delimitada por los ríos Pas y Pisueña, es conocida por su tradición en la elaboración de este dulce emblemático.
Los sobaos pasiegos son rectangulares, con superficie tostada y miga amarilla de color intenso. Su sabor dulce, aroma intenso a mantequilla y textura densa pero esponjosa los hacen irresistibles. También se distinguen por su presentación en una cápsula, conocida como "gorro", cuyos dobleces característicos son su seña de identidad.
Este paquete incluye dos estuches de 600 gramos y, cada uno, contiene cuatro sobaos pasiegos. Se presentan empaquetados individualmente en film, lo que permite que el producto tenga una vida útil de 60 días desde su fabricación y no requiera refrigeración. Una vez abierto, se recomienda consumirlo antes de 15 días para disfrutar de su máxima frescura.