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¿Cuánto paga de luz una oficina?

Trabajadores consumiendo luz de la oficina con luces y ordenadores

El gasto de luz en una oficina es una de las partidas más importantes en los costes operativos, llegando a suponer entre un 15 % y un 20 % de los gastos fijos de un negocio. El importe final en la factura de la luz dependerá de un amplio abanico de factores. El tamaño de las instalaciones, el número de empleados, la cantidad de equipos electrónicos y, por supuesto, la eficiencia energética del inmueble son solo algunos de los elementos que determinan el consumo.

Conocer el gasto medio de luz de las oficinas es fundamental para analizar los componentes que más impactan en el consumo. De este modo, se pueden identificar áreas de mejora y aplicar medidas de ahorro efectivas que optimicen los recursos de la empresa.

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¿Qué influye en el gasto de luz de una oficina? 

Para comprender y controlar el gasto de luz en una oficina, es necesario identificar los principales focos de consumo energético. A continuación, se detallan los factores que más influyen:

  • Iluminación: representa una parte significativa del consumo, especialmente en oficinas con jornadas laborales extensas o con poca luz natural. El tipo de luminarias (LED, fluorescentes, etc.) y su gestión son determinantes.
  • Climatización: los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) son los mayores consumidores de energía, especialmente en oficinas grandes. Su uso varía considerablemente según la estación del año y la ubicación geográfica.
  • Equipos ofimáticos: ordenadores, monitores, impresoras, servidores y otros dispositivos electrónicos consumen energía de manera constante durante la jornada laboral, e incluso en modo de espera (stand-by).
  • Aislamiento del edificio: un buen aislamiento térmico en ventanas, paredes y techos es clave para reducir la necesidad de climatización, evitando pérdidas de calor en invierno y de frío en verano.
  • Horarios y ocupación: el número de horas que la oficina está operativa y la cantidad de personas que trabajan en ella impactan directamente en el uso de la iluminación, la climatización y los equipos.
  • Tamaño de la oficina: una oficina con más metros cuadrados necesitará un mayor número de puntos de luz para estar bien iluminada. Del mismo modo, el volumen de aire a climatizar es mayor, lo que exige que los sistemas de calefacción y aire acondicionado tengan más potencia y, por tanto, un consumo superior. Además, una mayor superficie suele estar asociada a un mayor número de puestos de trabajo, lo que se traduce en más equipos informáticos conectados a la red. 

¿Cómo calcular el gasto de luz de una oficina?

Calcular el gasto de luz de una oficina permite planificar el presupuesto y detectar oportunidades de ahorro. Existen dos maneras de aproximarse al cálculo del consumo: una estimación rápida basada en el tamaño de la oficina y otra más detallada basada en el consumo individual de los aparatos.

Consumo de una oficina por tamaño (metros cuadrados)

Un método eficaz para obtener una estimación del consumo anual es utilizar los metros cuadrados de la oficina. De media, se calcula que una oficina en España consume alrededor de 100 kWh por metro cuadrado al año (100 kWh/m²).

Podemos ver el coste aproximado para diferentes tamaños de oficina:

  • En una oficina pequeña que tenga por ejemplo 75 m²:
    • Consumo anual: 75 m² x 100 kWh/m² = 7.500 kWh
    • Consumo mensual: 7.500 kWh / 12 meses = 625 kWh
    • Coste mensual: 625 kWh x 0,15 €/kWh = 93,75 €*
  • En una oficina mediana con un tamaño alrededor de 250 m²:
    • Consumo anual: 250 m² x 100 kWh/m² = 25.000 kWh
    • Consumo mensual: 25.000 kWh / 12 meses ≈ 2.083 kWh
    • Coste mensual: 2.083 kWh x 0,15 €/kWh = 312,45 €*
  • En una oficina grande que tenga de superficie total 1000 m², por ejemplo:
    • Consumo anual: 1.000 m² x 100 kWh/m² = 100.000 kWh 
    • Consumo mensual: 100.000 kWh / 12 meses ≈ 8.333 kWh
    • Coste mensual: 8.333 kWh x 0,15 €/kWh ≈ 1.250 €*

*Usando como referencia un precio de la luz de 0,15 €/kWh.

Este es un cálculo orientativo. El consumo real y el precio final del kWh dependerán de la eficiencia del inmueble, los hábitos de uso y la tarifa eléctrica contratada.

Calcular el consumo de una oficina por equipos

Este método es más detallado y consiste en sumar el consumo de cada aparato electrónico. La fórmula básica para cada uno es:

Consumo (kWh) = Potencia del equipo (kW) x Horas de uso

Para ello, necesitas identificar el consumo de cada equipo (bombillas, ordenadores, impresoras, climatización y otros dispositivos) y multiplicar el consumo de todos por las horas de uso al mes. Este es un proceso mucho más largo, pero más aproximado. 

Aunque estos métodos son útiles para una estimación, la forma más fiable de conocer el gasto exacto es revisar las facturas eléctricas emitidas por tu compañía. En ellas se detalla el consumo real del periodo de facturación, permitiendo un análisis preciso para tomar futuras decisiones de ahorro.

¿Cómo se puede reducir el consumo de energía en una oficina?

Reducir el gasto de luz en oficinas no solo disminuye los costes, sino que también contribuye a la sostenibilidad y mejora la imagen de la empresa. Aquí se presentan algunas medidas efectivas:

  1. Optimizar la iluminación: sustituir las luminarias convencionales por tecnología LED puede suponer un ahorro de hasta el 80 % en el consumo de iluminación. Aprovechar al máximo la luz natural y utilizar sensores de presencia en zonas de paso también son prácticas recomendables.
  2. Gestionar la climatización de forma eficiente: establecer una temperatura de consigna razonable (entre 21-23 °C en invierno y 24-26 °C en verano) y programar el apagado de los sistemas fuera del horario laboral utilizando termostatos es fundamental.
  3. Fomentar hábitos de consumo responsable: animar a los empleados a apagar los equipos informáticos al final de la jornada en lugar de dejarlos en stand-by y apagar las luces en las salas que no se estén utilizando.
  4. Invertir en equipos eficientes: al renovar los equipos ofimáticos, es aconsejable optar por aquellos con etiquetas de alta eficiencia energética (A o B), que garantizan un menor consumo.
  5. Revisar la potencia contratada: adecuar la potencia eléctrica a las necesidades reales de la oficina puede evitar sobrecostes innecesarios en la parte fija de la factura. Descubre cómo calcular la potencia que necesita tu negocio.

Las mejores tarifas de luz para tu oficina

Elegir una tarifa de luz adecuada es un paso decisivo para optimizar el gasto de luz en tu oficina. En Repsol, ofrecemos soluciones energéticas para empresas diseñadas para adaptarse a las necesidades específicas de cada negocio. Disponemos de una variedad de tarifas competitivas que te permitirán elegir la que mejor se ajuste al perfil de consumo de tu empresa. 

Al unir buenas prácticas en el día a día con una tarifa adecuada, además de disminuir los costes operativos, estarás mejorando la eficiencia y competitividad de tu negocio.