Tipos de energía solar híbrida
Los paneles solares híbridos se clasifican según su nivel de aislamiento y eficiencia. Partiendo de estos criterios, podemos identificar distintos tipos de placas híbridas:
- De generación 0 (PVT-0): es un sistema relativamente básico, formado por células fotovoltaicas, un dispositivo para absorber el calor y una caja de conexiones. Su principal característica es que no cuenta con aislamiento térmico en la superficie.
- De generación 1 (PVT-1): la principal diferencia respecto al anterior es la incorporación de una cubierta trasera. Su función es retener el calor para evitar su desperdicio y mejorar la eficiencia.
- De generación 2 (PVT-2): posee un medio de aislamiento térmico para evitar que el panel se enfríe en exceso. Además, su cubierta frontal es transparente para permitir una mayor incidencia de los rayos solares.
Los paneles híbridos alcanzan eficiencias del 60 % al 70 %, frente al 15 % aproximado de los paneles fotovoltaicos convencionales. En los próximos años se espera acercarse al 80 % de aprovechamiento solar total gracias a la mejora en materiales y al uso del calor residual.
¿Qué beneficios tiene la energía solar híbrida?
Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), esta es una de las soluciones energéticas más prometedoras de la actualidad. El motivo principal es su alta rentabilidad, ya que, aunque requiere una inversión inicial significativa, su recuperación es considerablemente más rápida que la de los sistemas tradicionales por separado.
Posee mayores oportunidades de aprovechamiento
La capacidad de generar energía por dos vías distintas (térmica y eléctrica) hace que este sistema sea muy eficaz para el consumo energético. Es posible obtener electricidad para el hogar o negocio y, al mismo tiempo, agua caliente sanitaria (ACS) para las instalaciones.
Es compatible con medios de almacenamiento
Esta modalidad híbrida es perfectamente compatible con sistemas de almacenamiento, como las baterías para placas solares. Esto permite guardar la energía excedente generada durante las horas de sol para utilizarla en momentos de baja o nula producción, como por la noche o en días nublados.
Amplía las posibilidades de instalación
Al obtener un beneficio considerablemente mayor de las horas de sol, es factible instalar estos paneles incluso en comunidades autónomas que disfrutan de menos horas solares pico. Por ejemplo, en el norte de España, donde esta tecnología está avanzando rápidamente gracias a su alta eficiencia.