Si alguna vez te has preguntado cuánto gasta tu ordenador, estás en el lugar adecuado. La mayoría pasan por alto este aspecto, pero conocer el consumo de tu dispositivo no solo te ayudará a entender tu factura eléctrica, sino que también te permitirá tomar medidas para ahorrar energía.
Esta guía desglosa varios aspectos importantes sobre su gasto energético, desde entender cuánto consume un ordenador hasta cómo reducirlo. Te ofrecemos información útil que te hará más consciente de tu huella energética.
¿Cuánto consume un ordenador?
Lo que gasta un PC fluctúa muchísimo en función de diversos factores, como los componentes que incorpora, la marca, el modelo y las tareas que realiza. Por lo general, un ordenador de sobremesa consume entre 120 y 600 W, mientras que un portátil requiere de 30 a 140 W. Sin embargo, si añadimos periféricos como un monitor externo, ratón, teclado o componentes de altas prestaciones, el gasto aumenta.
También has de tener en cuenta el tiempo de uso. Por ejemplo, si utilizas tu ordenador de escritorio 8 horas al día durante un mes, podrías estar consumiendo hasta 60 kWh (kilovatios hora). ¿Cómo afecta esto a tu factura? Según las tarifas eléctricas en España, te costará entre 7 y 15 euros al mes.
¿Quieres saber que electrodomésticos son los que más gastan en tu hogar? Consulta este artículo en el que te ofrecemos más detalles sobre el consumo de diferentes electrodomésticos.
Qué consume más: ¿un ordenador de sobremesa o un portátil?
Esta es una pregunta bastante común entre los usuarios de estos dispositivos. El PC de escritorio ofrece un rendimiento superior, pero este poder tiene su coste en términos de electricidad. Por lo general, los de sobremesa consumen más energía que los portátiles.
Un sobremesa con un monitor independiente llega hasta los 500 W. Incluso si se trata de modelos más eficientes, raramente bajan de los 300 W. En contraste, un portátil tiende a ser más económico energéticamente, ya que gasta en torno a 60 W. Este rango se debe en gran parte a que sus componentes están diseñados para ser más eficientes con el objetivo de prolongar la duración de la batería interna.
Por lo tanto, si tu principal preocupación es el gasto energético, un portátil podría ser la opción más adecuada. Sin embargo, no olvides que otros factores como el rendimiento, la capacidad de actualización y tus necesidades específicas también son importantes al tomar una decisión.
Si empleas el ordenador para trabajar desde casa y te interesa minimizar tu gasto energético, te resultará muy útil echar un vistazo a estas estrategias de ahorro de energía en el teletrabajo.