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Con la subida de los precios de la luz, cada vez son más las personas que se interesan por este ámbito. De hecho, conceptos como el voltaje eléctrico empiezan a resonar con frecuencia. Sin embargo, la sociedad no termina de entender realmente qué significan y, sobre todo, qué implican en una instalación.
Para que aprendas sobre un tema de actualidad como este, hemos preparado un artículo completo. Conocer este término y lo que implica es fundamental para tu día a día, pues sus variaciones provocan las subidas de tensión, entre otros factores. Igualmente, te ayuda a comprender la potencia y otros datos relativos a tu suministro.
Este concepto hace referencia a la presión que ejercen los electrones entre sí. Estos últimos son los átomos que transmiten la corriente (electricidad) por un circuito, que está formado por materiales conductores. Por lo general, se mide en voltios y se representa con la letra V.
Probablemente, habías oído hablar de este término, pero ¿sabías que la electricidad tiene otras dos variables? Estamos hablando de la impedancia y la potencia:
Junto a los anteriores, hay otro factor que te sonará: la intensidad. Se mide en amperios (A) y es la cantidad de carga eléctrica. De manera simple, es el número de electrones que circulan en un periodo de tiempo concreto.
Toda esta simbología suele resultar interesante para los consumidores, así como las diferencias entre mercado libre y regulado.
Ya sabes en qué se mide la tensión eléctrica, pero ¿con qué dispositivo se hace? Es probable que hayas visto a un técnico usarlo en alguna ocasión. Se trata del voltímetro, el cual determina la presión en tiempo real y la expresa en voltios (no los confundas con los vatios, que es un error muy común). Este aparato calcula la diferencia que tiene la potencia al principio y al final del circuito.
No obstante, hay otros artículos que pueden detallar la fuerza electromotriz que tiene una pila o una batería. Como curiosidad, es indispensable que tengan bastante resistencia para que no sobrecarguen el circuito que están analizando y generen un corte.
Hasta ahora, has podido hacer un repaso por los conceptos básicos. En este apartado, daremos respuesta a las dudas más comunes que tiene la sociedad sobre este tema. Cuanta más información tengas, mejor conocerás tus circuitos domésticos. Eso sí, recuerda contactar siempre con un profesional para no correr riesgos en caso de avería.
Lo más frecuente es que, en cualquier red de distribución, se utilicen líneas de alta tensión. El motivo es muy simple y te lo explicaremos en varios puntos:
La intensidad es el número de electrones que circulan por un punto. El voltaje, por su parte, es la diferencia entre la energía que hay en dos puntos del mismo circuito.
La baja tensión se da cuando hay una presión menor sobre los electrones. Frecuentemente, se debe a la necesidad de reducir la potencia de la electricidad para destinarla al consumo doméstico. Como hace falta menos energía, se mantiene por debajo de los 1000 - 1500 voltios.
El símbolo más utilizado es la V, que proviene de voltios. Sin embargo, en las ecuaciones se recurre a la E. ¿Sabes por qué? Simplemente, porque antes se conocía con el nombre de fuerza electromotriz.
Se califica como tal cuando el aumento de la presión es superior al 10%. Respecto a su duración, puede extenderse durante varios segundos e incluso minutos. Lo más frecuente es que el diferencial del cuadro se baje automáticamente. De esta manera, se evitan riesgos o consecuencias mayores.
Este es un fenómeno muy habitual que es capaz de provocar interrupciones de suministro o incluso averías en los dispositivos conectados a la red. Suele ocasionarse por sobrecargas por la caída de un rayo, aunque también puede deberse a una instalación deficiente o a exceder la potencia contratada
Otra de las situaciones es que exista una elevada tensión entre neutro y tierra.
¿Qué significa esto? Los valores normales se deben mantener alrededor de los 2 voltios, pero hay ocasiones en las que la cifra se supera e, incluso, se multiplica, lo que da lugar a una subida de tensión. Para conservar el equipamiento en buen estado y ahorrar energía en tu hogar, conviene solicitar siempre asesoramiento en consumo.
La tensión nominal es aquella que el fabricante ha marcado como adecuada. En consecuencia, es la máxima que el equipamiento puede soportar y no se debe superar para prevenir que se deteriore.
Muchas personas se preguntan si existe la media tensión. La realidad es que sí, y es la equivalente a una presión entre los 1000 y 36 000 kilovatios. Por debajo, estaríamos hablando de baja, mientras que el alta se situaría por encima del rango superior.
Como has podido comprobar a lo largo de este artículo, el voltaje eléctrico es la presión que los electrones. Está relacionado directamente con el alta, media y baja tensión, así como con sus subidas. Nuestro consejo es que controles tu consumo energético en todo momento para evitar daños o problemas. Nuestras tarifas te serán de gran ayuda para ahorrar. ¡Descúbrelas!
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